El Dr. Phineas Taggart fue un científico en robótica y creador de El Stitchwraith en la serie de libros Fazbear Frights.
Apariencia[]
El Dr. Phineas era descrito como un hombre adulto muy pulcro en su apariencia. Llevaba una bata de laboratorio blanca, una camisa gris y una corbata roja. Mantuvo su cabello grisáceo corto y su cara limpiamente afeitada.
Historia[]
En el epílogo del tercer libro, se presenta al Dr. Phineas como un científico que estudiaba los conceptos de las emociones humanas y cómo estas se pueden usar como una fuente de energía. Él cree que los humanos pueden crear un "escudo protector de energía" para así protegerse contra las intenciones dañinas. Su investigación más importante sobre las emociones es la "agonía", que él creía que era la emoción más fuerte de todas las demás, lo suficiente como para afiliarse a un objeto inanimado y darle vida. Para sus experimentos, compró objetos "poseídos", como dispositivos de tortura, en subastas por internet. Sin embargo, no le gusta el término, preferiría creer que están "energizados por la agonía" en lugar de que los objetos estén poseídos por fantasmas.
Cada semana, Phineas recibe un nuevo envío de objetos cargados de emociones. Un día, recibió un endoesqueleto para su proyecto más grande hasta el momento, junto con algunos otros elementos nuevos y energizados. El Dr. Phineas se pone a trabajar en el endoesqueleto. Primero le arrancó la cara a Simon, un muñeco blanco dibujado, y lo colocó en la cabeza del endoesqueleto. Luego, destrozó a Fetch, un perro animatrónico desechado, y puso su bateríaa en el endoesqueleto. Una vez que el agonizante endoesqueleto comenzó a moverse, sus dedos metálicos intentaron tocar a Phineas. Su batería comenzó a brillar en rojo, y Phineas sintió el peligro y trató de crear un escudo mental. Murió, sintiendo un dolor insoportable y su conciencia aniquilada.
El cadáver momificado y sin ojos de Phineas fue descubierto más tarde por Ruben, quien estaba preocupado porque Phineas nunca se perdía una comida en su camioneta. Llamó a la policía, que investigó, y afirmó que sospechaban que había algún tipo de descarga eléctrica que mató a Phineas.
La creación que Phineas desató en el mundo se convirtió en una leyenda urbana, siendo vista por varias personas en basureros y edificios abandonados llevándose chatarra.